Pickleball en las aulas: el deporte que está revolucionando la educación física escolar
El auge del pickleball en España es imparable. Lo que comenzó como una tendencia emergente en Estados Unidos ha cruzado el Atlántico con fuerza, encontrando en nuestro país un terreno fértil para su desarrollo, especialmente en el entorno educativo. Desde Pickleball Europe, organización pionera en la promoción de este deporte, se ha lanzado un ambicioso proyecto que sitúa al pickleball como una actividad extraescolar clave en la formación integral del alumnado.
Roberto Dueñas, gerente de Pickleball Europe y uno de los impulsores de esta iniciativa, ha compartido recientemente en la revista Grand Slam los detalles de esta innovadora propuesta. Según Dueñas, “la escuela es el lugar ideal para que el pickleball eche raíces y crezca”, y los resultados están siendo tan prometedores como gratificantes.
Un proyecto que empezó en Málaga y ya apunta al futuro
El Colegio Los Olivos, en Málaga, fue el primero en sumarse a esta iniciativa. En tan solo un año, 75 alumnos de primaria y secundaria participan cada trimestre en la escuela de pickleball que el club organiza en el centro. La demanda ha crecido tanto que ya existe lista de espera. Este éxito se debe, en parte, a la forma en que se ha diseñado el contenido: técnica básica, juego adaptado, dinámicas de grupo y trabajo en valores.
Los beneficios son múltiples y van mucho más allá de lo físico. “Hemos visto mejoras claras en la condición física de los alumnos, pero también en su actitud, en la inclusión dentro del aula y en el desarrollo de habilidades sociales como la empatía o la comunicación”, explica Dueñas. “Todo esto contribuye a crear una disciplina saludable y un entorno de respeto mutuo”.
Formación continua y torneos intercentros
Pero el proyecto no se queda en la actividad extraescolar básica. Pickleball Europe ya ha activado una segunda fase: la academia de tecnificación. Aquí, los estudiantes más entusiastas pueden recibir una formación continua adaptada a su nivel y edad, guiados por entrenadores titulados por la Real Federación Española de Tenis.
Además, se están organizando torneos entre los centros educativos que participan en el programa, con la idea de formar ligas municipales. Estas competiciones permiten que los alumnos vivan sus primeras experiencias deportivas en un ambiente motivador y de compañerismo, al mismo tiempo que se abre la puerta a un futuro competitivo para quienes deseen ir más allá. “Quién sabe si de aquí puede salir el próximo campeón de España o de Europa”, apunta Dueñas con ilusión.
Pickleball: un deporte que une generaciones
Uno de los aspectos más valorados por las familias es el componente intergeneracional del pickleball. A diferencia de muchos deportes escolares, este permite que padres y madres jueguen junto a sus hijos. No se trata solo de ir a verlos jugar, sino de compartir pista y emociones. “Es muy especial ver cómo se iluminan los ojos de los niños cuando están jugando con sus padres. Se crea un vínculo único, a través del deporte y el tiempo compartido”, destaca Dueñas.
Más que un juego: una herramienta educativa
El proyecto escolar de Pickleball Europe se fundamenta en tres pilares esenciales:
Inclusividad: Es un deporte accesible, que pueden practicar alumnos de distintas edades y habilidades, sin importar su condición física.
Desarrollo integral: Mejora la coordinación, el estado físico y las habilidades cognitivas y sociales.
Promoción de valores: Fomenta la cooperación, el respeto, la disciplina y el trabajo en equipo.
El pickleball ha dejado de ser una simple curiosidad para convertirse en una potente herramienta educativa. Desde Pickleball Europe, están convencidos de que este es solo el comienzo de una gran historia que seguirá creciendo, punto a punto, en las escuelas de todo el país